"La niña que iba en hipopótamo a la escuela" en el blog de Isi


Como debo de ser la única persona del país que no ha leído La fórmula preferida del profesor, tengo que confesar que este que reseño hoy es mi primer libro de Yoko Ogawa. Casi se me había olvidado que la autora era japonesa hasta que comencé a leer, porque no sé qué tienen los nipones que escriben, a todas luces, distinto. Y tampoco podría decir qué es lo que les diferencia de los escritores occidentales; tal vez sea la manera de hacerte creer que algo tan disparatado como es montarse encima de un hipopótamo sea de lo más normal.

Si la autora y la protagonista no tuvieran nombres distintos, habría pensado que es una novela autobiográfica porque nos presenta una historia nada corriente vista desde la perspectiva de una niña, y lo hace de tal manera que te encuentras allí; viviendo aquellas anécdotas que acontecieron en su infancia y sintiendo las cosas tal y como se sienten a esa edad.

Tomoko es una niña a la que su madre envía fuera de casa para empezar la educación secundaria en una nueva escuela; se irá a vivir con sus tíos, a los que todavía no conoce. Es la misma Tomoko la que nos narra la historia. Sus tíos son gente de dinero y viven en una gran casa de estio occidental con un gran terreno alrededor para recreo de los niños y de una mascota, Pochiko: la hipopótamo enana de Liberia que antes fuera una de las atracciones del zoo que se encontraba en la propiedad. LEER MÁS

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